Combinar bien los alimentos

Para que nuestro cuerpo realice una correcta digestión de lo que comemos debemos darle una correcta combinación de los alimentos, al menos en el día a día. Esto es lo que podemos hacer desde nosotros conscientemente, de lo demás se encarga amorosamente nuestro organismo.

Luego de una excelente combinación de los ingredientes de nuestra comida habrá una excelente digestión y luego una correcta asimilación de todos los nutrientes. Es aquí donde nuestro cuerpo podrá sacar lo mejor de sí mismo.


Sabemos que los niveles de fatiga crónica, sobrepeso, colon irritable, angustia, falta de energía, insomnio, gastritis, acidez y un sin fin de problemas más son debidos muchos de ellos, entre otras causas, a que hoy en día hay poco tiempo para cocinar, para comer con tranquilidad, a consciencia, para disfrutar y tener placer de lo que estamos ingiriendo… Por eso, no es una novedad, hay una gran parte de la gente a nuestro alrededor, enferma.

Muchas personas conocidas lo asumen como un estado natural, porque es lo que toca o por la edad. Pero esto no es verdad. Si por algún motivo hemos enfermado, sepamos que hay en el cuerpo una renovación y reparación constante casi diariamente de todas nuestras células. Podemos cambiar ese “vaticinio” con la alimentación sana, genuina, real.

Allí están los materiales que necesita nuestro organismo para reparar, equilibrar y armonizar nuestro cuerpo. La enfermedad no es un estado que llegó para quedarse, si lo es la salud, es nuestro estado natural. Obviamente que lo perdemos cuando consumimos la gran cantidad de alimentos ultraprocesados, cada vez más llenos de químicos artificiales de todo tipo.

¿Qué logramos con una buena alimentación?

• Regularizar el peso corporal, tan importante desde el punto de vista de la salud,
  pero también para muchas personas desde el punto de vista estético.
• Sanar toda la sintomatología de distención, flatulencias, constipación y/o diarreas.
• Poder disfrutar de un bienestar natural, tener mejor humor, más alegría.
• Mejor descanso, sueño profundo. Y con ello una energía plena.
• Excelentes digestiones, sensación de ligereza, de confort.
• Comer un poco todo (lo natural), bien combinado.

Y puedo asegurarles que muchos de los beneficios de una alimentación sana los comenzamos a notar muy pronto… el organismo sabe qué hacer cuando le damos con nuestras comidas en el día a día los mejores materiales de construcción, de reparación, vitales, reales.